En psicología, la resiliencia se define como la capacidad de los seres humanos para adaptarse positivamente a situaciones adversas, superando golpes duros de la vida. En pocas palabras, es la capacidad de sobreponerse a un estímulo adverso.
Características
Las personas resilientes tienen gran capacidad de entereza pues superan alguna situación complicada, mantienen la sensación de control frente a los acontecimientos, salen fortalecidos y mejor que antes para afrontar retos.
La resiliencia se aprende en un proceso que requiere tiempo y esfuerzo. La resiliencia no es una característica que la gente tiene o no tiene. Incluye conductas, pensamientos y acciones que pueden ser aprendidas y desarrolladas por cualquier persona.
Ante las situaciones adversas, las personas resilientes tienen la capacidad de hacer planes realistas y seguir los pasos necesarios para llevarlos a cabo. Mantienen además una visión positiva de sí mismos y tienen confianza en sus fortalezas y habilidades. Además tienen destrezas en la comunicación y solución de problemas así como la capacidad para manejar sentimientos e impulsos fuertes.
Ejemplos
Algunos ejemplos de resiliencia es sobreponerse por ejemplo a circunstancias traumáticas como la muerte de un ser querido, un accidente, el maltrato, el abuso psíquico o físico, prolongadas enfermedades, el abandono afectivo, el fracaso, la pobreza extrema, o a situaciones catastróficas y aún así seguir manteniendo las competencias pese al estrés continuo, etc.
Consejos
Enfocarse en las experiencias y en las fuentes de fortaleza personal del pasado ayudan a identificar las estrategias para desarrollar resiliencia.
Para construir la resiliencia se recomienda…
1. Establecer relaciones con familiares y amigos importantes.
2. Evitar ver las crisis como obstáculos insuperables.
3. Aceptar que los cambios son parte de la vida.
4. Desarrollar y movernos hacia nuestras metas.
5. Llevar a cabo acciones decisivas.
6. Buscar oportunidades para descubrirnos a nosotros mismos.
7. Cultivar una visión positiva de nosotros mismos.
8. Mantener las cosas en perspectiva.
9. Nunca perder la esperanza.
10. Cuidar de nosotros mismos.