Los queloides son lesiones densas y fibrosas formadas en la piel por el crecimiento exagerado del tejido cicatricial en el lugar de una lesión cutánea que puede ser una herida o una incisión quirúrgica, una quemadura, acné, varicela, piercings, etc.
El tejido cicatricial provoca un área rojiza o rosada, elevada sobre la piel con rebordes, la cual por lo general es sensible, genera picazón y no resulta dañina para la salud, sino que solamente es molesta por su apariencia antiestética.
¿Cómo saber si se tenemos un queloide? Para ello necesitamos hacernos una biopsia de piel, la cual deberá ser analizada por el médico.
Cuando los queloides son demasiado extensos, pueden limitar la movilidad de las manos, pies o extremidades. Para contrarrestar los queloides podemos optar por diversas opciones como las cirugías, apósitos húmedos, esteroides inyectables, compresas, crioterapia, radioterapia y terapias con láser.