La Metoclopramida es un antiemético y agente procinético utilizado para aliviar los síntomas de náuseas, vómitos, acidez estomacal y pérdida del apetito en los tratamiento por la quimioterapia, procesos postoperatorios, gastroparesia diabética o reflujo gastroesofágico.
La Metoclopramida se encuentra disponible en tabletas, solución líquida e inyectables. Generalmente se toma 4 veces al día.
Entre los efectos secundarios de la Metoclopramida encontramos a la somnolencia, cansancio excesivo, confusión, depresión, debilidad, dolor de cabeza, mareos, diarrea, náuseas, vómitos, hipotensión, braducardia, astenia, perdido período menstrual, disminución de la capacidad sexual, orinar frecuentemente y la incapacidad para controlar la orina.
Las personas con hipersensibilidad, hemorragia gastrointestinal, epilepsia, insuficiencia renal e insuficiencia hepática deben abstenerse de ella así como las mujeres embarazadas y en etapa de lactancia.
Entre las marcas comerciales de la Metoclopramida encontramos a Metoclopramide Hydrochloride Intensol, Reglan y Carnotprim.