La ecografía 4D se trata de la adquisición y presentación continua de volúmenes, gracias a que por medio de esta técnica se encuentran involucradas cuatro dimensiones. De las cuatro, tres son espaciales (volumen) y una temporal que se refiere al momento en que obtuvo ese volumen. En palabras más sencillas, la ecografía 4D nos muestra lo mismo que una 3D con la diferencia que varía en el tiempo. Es decir puede emplearse para ver al feto en movimiento.
Si bien es cierto que la ecografía 4D permite conocer el estado del feto durante el embarazo, también puede emplearse en ginecología, lo que se conoce como Ginecológica 4D. Con la famosa Histerosongrfía se puede adquirir volúmenes en lugar de cortes que permiten registrar en segundos todo el útero del paciente después de la inyección de solución fisiológica. Cuando ya está registrado, el médico puede realizar cortes selectivos de aquel volumen para tener un diagnóstico más preciso.
Gracias a la tecnología 4D se puede registrar malformaciones uterinas, esta técnica 4D permite la obtención de cortes imposibles para una ecografía simple. Una función muy importante se enfoca a la “Fertilidad” pues se pueden realizar análisis de formas y medición de volúmenes que detectan el folículo dominante. Sin duda un alternativa muy conveniente para la salud femenina.