Al hablar de vestidos nótese que no siempre es necesario optar por un estilo en demasía llamativo para la vista, siendo posible poder llevar uno de diseño sencillo que con un pequeño detalle pueda terminar resaltando ante el resto de casos. Aparte, al hablar de vestidos sencillos no se está haciendo referencia a un estilo particular, pudiendo utilizarse toda clase de materiales como también largo, colores, etc.
Por ejemplo, lo básico para un vestido sencillo podría ser la carencia de mayor presencia de adornos, con lo cual lo más probable sería que el color o diseño estampado de la tela sea lo primordial, con esto mismo también se puede apreciar que el vestido también se centrará primordialmente para poder destacar la figura femenina.
Muchas veces los detalles que acompañen al vestido en sí van a terminar haciendo la diferencia, no opacando al vestido en sí pero resaltando algunas cuantas de sus características. Es de esta manera que una buena correa o tacos pueden lograr darle al vestido un acabado mucho más especial en donde la imagen queda mucho más trabajada. Al fin al cabo esto es cuestión de saber combinar colores y estilos en los complementos para un mejor resultado del look en general.