Bolsas, chapas, botellas de plásticos, periódicos viejos, paraguas rotos… hoy en día son protagonistas de la tendencia más sorprendente de la industria de la moda.
Es difícil saber cuál fue el primer vestido hecho con materiales reciclados, pudiéramos pensar que Andy Warhol tuvo algo que ver en el asunto, por lo de convertir una lata de sopa en arte, en moda, o rememorar a las personas que debían vestir con costales de harina siglos atrás por no tener otro atuendo más apropiado. Cual fuere su origen, hoy en día los vestidos Recycled Fashion, más que la expresión cliché de la conciencia ecológica, son toda una nueva tendencia en la que los diseñadores más audaces y competitivos se ponen a prueba.
Los vestidos hechos de papel ocupan un lugar central en esta moda y ejercen un especial poder de fascinación tal que bien se podrían lucir en el altar de una boda. Por lo menos así lo propone la renombrada modista nupcial inglesa Jennifer Pritchman. Como parte de su colección Word Dress, elaboró un vestido de novias hecho con las páginas de libros escritos por la autora Clairey Massey, que lució el vestido con encaje, papel maché, pegamento y cola, mientras leía uno de sus propios relatos de hadas. El español Juan Duyos ofrece modelos más vanguardistas aún en sus vestidos de novia, hechos con chapas metálicas y rollos de papel higiénico (!).
Más sorprendentes aún son los vestidos hechos de naipes, cajas de cartón, teclados de computadora, jirones de abrigos viejos, celofán, bolsas de basura, y hasta de condones.
Una vez hecho el vestido no podrían faltar los accesorios, como una pulsera hecha con teclas de máquina de escribir, collares hechos en base a chapitas de Heineken. El calzado se puede obtener de las mangas de antiguos abrigos.
En plena sintonía con la tendencia do it yourself de estos días, varios websites muestran la forma de agenciarse, por ejemplo, un simpático chaleco recortado de una bolsa de pan. Risas más, risas menos, Are you ready?
oye me puedes dar mas fotos del ultimo vestido gracias