En la mayoría de casos, las novias prefieren utilizar sandalias para su matrimonio. Los zapatos cerrados no siempre combinan bien con los vestidos por el modelo o el color. Las sandalias, en cambio, les brindan más alternativas. Pero hay que tener cuidado. Debes recordar algunos tips para evitar heridas en tus pies o cansancio por estar de pie por mucho tiempo.
En primer lugar, si no estás acostumbrada a usar tacones altos entonces no tienes por qué hacerlo en tu matrimonio. Recuerda que es tú matrimonio y deben ser tu esposo y tú quien más lo disfruten. No querrás pasar toda la noche con los pies adoloridos y lastimados. Busca opciones de sandalias con un taco regular pero que tenga los adornos grandes en la parte delantera. Aunque tu vestido llegase a cubrir tus pies, si en algún momento estos quedan al descubierto, llamará la atención el arreglo de la parte de adelante y el talón será olvidado.
Trata de utilizar tus sandalias al menos un par de veces antes el gran día. Acostumbra tu pie al zapato para evitar que las tiras no te marquen demasiado y no te hagan alguna herida. Evita utilizar sandalias aterciopeladas o de gamuza. Con ese tipo de material, tu pie sudará más rápido y eso podría ocasionar que te resbales o se ensucie más rápido. Deja que tu pie respire un poco y utiliza cuerina o satén. También es importante que tengas en cuenta los colores. Los más recomendables para la elección de tus sandalias son marfil, crema, y hueso. No es muy buena idea que las sandalias sean blancas porque la suciedad se hace más notoria y molesta.
No lo olvides. Este es tú día. Así que no solo tienes la opción de verte preciosa sino también de sentirte cómoda.