Los más económicos son los masajes. Existen dos variedades, a saber: reductivos y de drenaje linfático. Los primeros utilizan velocidad y presión manual para disminuir el acumulo de grasa en zonas bien localizadas, en $20 por sesión. En cambio, el masaje de drenaje linfático es más especializado, ya que trata de canalizar el líquido retenido hacia el sistema circulatorio. Se aplica en piernas, glúteos, zona lumbar y dorsal, y es muy eficiente contra las celulitis y várices, y la sesión puede costar desde $50.
Ataca también la flaccidez, que no es más que la pérdida de colágeno en la piel. Para ello, existen las técnicas de mesoterapia y radiofrecuencia. La primera, se trata de pequeñas inyecciones de reafirmantes en la piel, y cuesta desde $80. La segunda, consiste en el calentamiento no doloroso y profundo del tejido cutáneo para estimular la generación de colágeno, además de eliminar líquidos y toxinas de la celulitis. El precio: a partir de $200 por sesión.
Por último, no está demás la ultracavitación, alternativa sana de la liposucción, que radica en la aplicación de ultrasonidos en abdomen, piernas y brazos para hacer que la grasa se licúe y pueda ser expulsada por la orina. El problema es el precio, alrededor de $300 cada sesión.
Otros tratamientos corporales importantes son:
• Tratamiento para adiposidad, adelgazamiento y grasa localizada
• Tratamientos para las estrías
• Tratamientos para problemas circulatorios, pesadez de piernas y varices