Desde el punto de vista técnico, la nutrición es en sí la ciencia que se encarga de estudiar y mantener el equilibrio homeostático del organismo a nivel molecular y macro sistémico, haciendo que el cuerpo funcione de la mejor manera posible para evitar la aparición de diversos males relacionados. Todo esto comienza a tornarse mucho más complejo cuando se debe mencionar los procesos de digestión y metabolismo de elementos como vitaminas, minerales, enzimas, hormonas, glucosa y demás componentes que tienen influencia sobre nuestro cuerpo. Por ello mismo, y gracias a todo lo mencionado con anterioridad, bien se puede asegurar que la nutrición es la ciencia que se dispone a estudiar la conexión entre la alimentación y la salud.
Muy al pesar de la creencia popular, con una buena alimentación las personas pueden llegar a prevenir un buen número de enfermedades comunes e inclusive curarlas, es aquí donde el papel del nutricionista toma un rol importante ya que te ayudará a encontrar cuales son los elementos que influirán positivamente en tu salud. Esto último, desde un punto de vista más técnico, podría ser explicado como la búsqueda de buenos resultados metabólicos ante una dieta alimenticia, pasando la respuesta al campo fisiológico.
Hoy en día existen diversas especializaciones en el campo de la nutrición, por ejemplo, el nutricionista clínico, el que se asemeja mucho más a lo que se explica con anterioridad, tomando en cuenta factores secundarios como la religión y preferencias del paciente. También está el de restauración colectiva, encargado de los detalles nutricionales destinados al proceso de de producción de alimentos, así como la instrucción al respecto. Encontramos además al nutricionista de industria, encargado de campos como el marketing y la creación de nuevos productos destinados directamente a la alimentación.